El FBI solicitó públicamente ayuda el domingo para identificar a siete hombres a los que se vio golpeando a un oficial de policía de Washington, DC, en imágenes ahora virales capturadas durante la letal insurrección pro-Trump el 6 de enero. Un papel en agredir al oficial Mike Fanone mientras otros alborotadores irrumpieron en el Capitolio para descarrilar la certificación de la elección presidencial, que Trump perdió.
Las imágenes del motín muestran a una turba violenta golpeando al oficial por un tramo de escaleras, a veces arrastrándolo por el cuello y golpeándolo con una bandera estadounidense. Después del asalto, Fanone le dijo a CNN que sus atacantes lo golpearon con una pistola paralizante varias veces y recordó que los transeúntes les gritaban que “lo mataran con su propia pistola”.
En consecuencia El FBI activo el llamado publico para tratar de encontrar a los responsables de los ataques.
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Las imágenes de su ataque se encuentran entre la gran cantidad de videos y fotos que han surgido desde el 6 de enero, lo que hace que el alcance total de la violencia de los disturbios sea más claro.
Varios insurrectos en la escena durante el asalto al Capitolio murieron, dijeron las autoridades. Dos agentes de la Policía del Capitolio que respondieron ese día también murieron, incluido el agente Brian Sicknick, quien fue golpeado en la cabeza con un extintor de incendios , y el agente Howard Liebengood, quien murió por suicidio el fin de semana posterior al ataque, informe que maneja el FBI.
Los manifestantes pro-Trump chocan con el oficial de policía de DC Michael Fanone en un mitin para impugnar la certificación de los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 por parte del Congreso el 6 de enero.
El miércoles, la Cámara de Representantes votó para acusar a Donald Trump por segunda vez histórica , emitiendo un solo cargo – “incitación a la insurrección” – después de que alentó a los manifestantes a marchar al Capitolio para evitar que el Congreso y el vicepresidente Mike Pence certificaran su pérdida electoral. “Nunca nos rendiremos, nunca cederemos”, dijo Trump a los que pronto se convertirían en alborotadores la mañana del 6 de enero .
Las autoridades federales se encuentran actualmente en las primeras etapas de lo que dicen será una extensa investigación criminal de meses de duración sobre los disturbios.
Algunos de los insurrectos más reconocidos ya han sido identificados y arrestados, pero las autoridades también han reconocido en gran medida un obstáculo inevitable para llevar a muchos más ante la justicia: a la mayoría de los alborotadores que irrumpieron en el Capitolio se les permitió abandonar la escena sin ser arrestados.
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